El Camino de Santiago, a su paso por Asturias por la denominada ruta costera, fue una de las más vías más transitadas en los primeros años de peregrinación.
Entra en el concejo de Ribadesella por la localidad de Cuerres, cruzando un puente medieval sobre el río Guadamía.
En esta zona se pueden visitar la iglesia de San Mamés y una fuente del siglo XVIII.
Desde Cuerres, el camino avanza hacia Toriellu, donde es posible apreciar antiguos caminos rurales y la cercanía con la vía férrea.
El Camino discurre entre bellos paisajes costeros y acantilados, siendo especialmente destacables los de Palu Verde y El Infiernu, que ofrecen espectaculares vistas del litoral cantábrico.
Vale la pena desviarse un poco del Camino para visitar la Iglesia de San Martín de Collera, que en el pasado fue parte de un importante monasterio.
Al llegar a la villa, por el barrio de El Portiellu, se puede disfrutar del casco antiguo, donde destacan el palacio renacentista de Prieto-Cutre, la iglesia nueva con significativas pinturas en su interior y la capilla de Santa Ana, recientemente restaurada.
Ribadesella cuenta además con un antiguo hospital de peregrinos que funcionó desde el siglo XV hasta el XIX, reflejando su importancia histórica como parada en el Camino.